¿Se siente menos ambicioso?
Estás acostumbrado a considerarte una persona de grandes logros, pero últimamente no sientes esa chispa de ambición que te caracteriza. ¿Es un error? En absoluto. Aquí tienes tres tácticas que puedes utilizar para hacer las paces con tu deseo de bajar el tono, aunque ese impulso entre en conflicto con la visión que tenías de ti mismo. En primer lugar, adopta una mentalidad flexible y reconoce cuándo es el momento de cambiar de estrategia.
Esto podría significar reconocer que puede haber llegado el momento, tras años o décadas de duro trabajo, de reasignar la energía a la salud y la felicidad, la familia o las aficiones y pasiones fuera del trabajo. A continuación, entiende que no hay un calendario estandarizado. Tu carrera es un maratón; permítete bajar el ritmo de vez en cuando, hacer pausas mentales y seguir tu propio ritmo. Por último, averigua qué necesitas para crecer.
Avanzar no siempre consiste en conseguir un aumento de sueldo, establecer nuevos contactos profesionales o mejorar tu currículum. A veces se trata de cambiar las cosas y exponerse a nuevos estímulos -ya sea un viaje de un mes al extranjero o un año de alejarse de la rutina y centrarse en otras áreas de la vida y el bienestar- que, con el tiempo, conducen a resultados nuevos y diferentes.
Comments